domingo, 18 de diciembre de 2011

¡LA MINERIA INFORMAL VA!!!!!!!............EL MANTARO ESTA COMPLETAMENTE COCHINO........


Junín: mineros informales contaminan aguas tratadas previamente

, Junín, Minería informal, Río Mantaro, Chinalco

A un año de haber entrado en funcionamiento la costosa planta de tratamiento que construyó la empresa Chinalco como condición para explotar el yacimiento de Toro Mocho en Morococha (Junín), las aguas ácidas provenientes de los asientos mineros de la zona y que discurren por el túnel Kingsmill, ya tratadas y asequibles para la vida humana, solo se mantienen limpias unos cuantos kilómetros y luego vuelven a contaminarse.
La acción incontrolada de la minería informal sigue contaminando el río Mantaro y todo el valle. Por el túnel Kingsmill discurren todas las aguas de la explotación minera de Yauli y Morococha y hasta antes de entrar en funcionamiento la planta de tratamiento constituía uno de los principales focos contaminantes de los afluentes de la zona.
Por ello, los 44 millones de dólares que invirtió Chinalco en la planta de tratamiento de aguas ácidas –como parte del compromiso asumido para iniciar operaciones de extracción el próximo año– fue una noticia que entusiasmó a todos. Aunque a la minería informal parece no importarle la calidad de vida de las personas ni el medio ambiente.
En la planta se tratan las aguas ácidas del túnel Kingsmill con contenidos altos en metales especialmente de hierro, manganeso, zinc, plomo, arsénico, aluminio, cadmio, etc., que hasta antes de su funcionamiento eran vertidos al río Yauli.
Ahora el agua que sale de la planta y se vuelve a verter al río Yauli no tiene coloración alguna, es decir, cumple con los límites permisibles de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sin embargo, el túnel Kingsmill no es la única fuente de contaminación. Aguas abajo del río Yauli, ya fuera del control de la empresa minera que explotará Toro Mocho, se observa que el líquido tratado es nuevamente contaminado por los mineros informales que vierten desechos tóxicos en varios puntos y por las filtraciones que se producen hasta que el afluente se une al río Mantaro.
Los informales han creado todo un nuevo ciclo de contaminación: las aguas rojas que salen por el túnel Kingsmill en el sector de Marh Túnel y que son procesadas en la costosa planta de tratamiento, ya de un color claro y transparente, apenas llegan a recorrer unos 5 kilómetros hasta la zona conocida como Cutt Of, donde nuevamente mineros informales que explotan agregados en pleno cauce del río Yauli vierten desechos tóxicos en varios puntos.
ESPIRAL DE CONTAMINACIÓN
Siete kilómetros más abajo, un torrente de aguas ácidas llega al cauce en forma de catarata, con el característico color rojizo o ladrillo, y se une a las descontaminadas aguas que van al río Mantaro.
Ya en el mismo río Mantaro, aparte de la contaminación que produce el complejo metalúrgico de Doe Run cuando está operando, los pasivos ambientales más importantes que contaminan este importante recurso acuífero son el depósito de relaves y drenaje ácido de Carhuacayán; el desmonte en las minas Pucará y Huacracocha; los relaves y el drenaje ácido en el Río Pallanga (provincia de Yauli). Esto, según un inventario del Ministerio de Energía y Minas.
SEPA MÁS
¿Quién protege el río mantaro?
Según estudios del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el río Mantaro recibe las aguas contaminadas de 32 vertimientos mineros de al menos nueve empresas.
Además, según el mismo informe, recibe aguas servidas de desagües de 43 distritos y la basura de 34 centros poblados.
Al atravesar el valle del Mantaro se irrigan con sus aguas contaminadas 11.000 hectáreas de superficie agrícola.
El río Mantaro nace del lago Junín ya contaminado especialmente por metales pesados en cantidades elevadas: cobre y cadmio 4 veces más de lo permitido, plomo 13 veces más y hierro más de 30 veces de lo permitido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario