Toledismo entra en trompo
No se lo perdonan. Luego que el Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, acusara a Alejandro Toledo de estar poniendo “zancadillas” al gobierno de Ollanta Humala, más de un dirigente chakano salió al frente para lanzar sus dardos contra el laureado escritor, en defensa del ex jefe de Estado.
Uno de ellos fue Gilberto Díaz, quien calificó como una “estrategia mediática” las “zancadillas” que acusa Vargas Llosa, para impedir que se cuestione el patrocinio que desplegó en favor de Luis Alberto Peirano Falconí, flamante ministro de Cultura.
“Ya tiene su ministro puesto en el gabinete, el ministro de Cultura Peirano. Vargas Llosa lo promovió en el gobierno”, dijo Díaz Peralta tras argumentar el nexo entre el novelista y el ahora funcionario público. “Peirano es quien ha producido los rodajes y películas de Vargas Llosa y ahora le estaría devolviendo el favor”, agregó.
Uno de ellos fue Gilberto Díaz, quien calificó como una “estrategia mediática” las “zancadillas” que acusa Vargas Llosa, para impedir que se cuestione el patrocinio que desplegó en favor de Luis Alberto Peirano Falconí, flamante ministro de Cultura.
“Ya tiene su ministro puesto en el gabinete, el ministro de Cultura Peirano. Vargas Llosa lo promovió en el gobierno”, dijo Díaz Peralta tras argumentar el nexo entre el novelista y el ahora funcionario público. “Peirano es quien ha producido los rodajes y películas de Vargas Llosa y ahora le estaría devolviendo el favor”, agregó.
¿Vocero del gobierno?
Por su parte el vocero de Perú Posible, Juan Sheput, acusó a Mario Vargas Llosa de preocuparse “exclusivamente” por el factor económico del país, y de olvidarse “que hay una serie de señales de claudicación ante la lucha contra la corrupción, de la falta de respeto contra los derechos humanos y de ignorar la institucionalidad y el sistemas de partidos en este gobierno”.
Consideró que el literato es usado en una suerte de campaña de desprestigio contra Perú Posible por parte del gobierno, “para que la sociedad tenga la percepción de una exigencia en el partido por una serie de carteras ministeriales”.
“Ciertamente (Vargas Llosa) es una de esas personas de buena voluntad que creen en lo que les dicen y salen a afirmar, con una gran vocación de fe, lo que ni siquiera conocen en términos políticos. Cuando se convierten en voceros oficiosos del gobierno, son personas utilizadas que no conocen los entretelones de la negociación política”, refirió Sheput.
Por su parte el vocero de Perú Posible, Juan Sheput, acusó a Mario Vargas Llosa de preocuparse “exclusivamente” por el factor económico del país, y de olvidarse “que hay una serie de señales de claudicación ante la lucha contra la corrupción, de la falta de respeto contra los derechos humanos y de ignorar la institucionalidad y el sistemas de partidos en este gobierno”.
Consideró que el literato es usado en una suerte de campaña de desprestigio contra Perú Posible por parte del gobierno, “para que la sociedad tenga la percepción de una exigencia en el partido por una serie de carteras ministeriales”.
“Ciertamente (Vargas Llosa) es una de esas personas de buena voluntad que creen en lo que les dicen y salen a afirmar, con una gran vocación de fe, lo que ni siquiera conocen en términos políticos. Cuando se convierten en voceros oficiosos del gobierno, son personas utilizadas que no conocen los entretelones de la negociación política”, refirió Sheput.
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