El presidente del Poder Judicial, César San Martín, señaló que la decisión de la Sala Penal para Reos en Cárcel derevocar la orden de captura contra Giuliana Llamoja Hilares, sentenciada a 12 años de prisión por el asesinato de su madre, se dio en un contexto “claro y limpio”.
De esta forma, minimizó los cuestionamientos hechos por el hermano de la matricida, Luis Llamoja Hilares, en contra de Juan Emilio Gonzales Chávez, titular del tribunal que tomó la decisión de liberar a la matricida. En su momento, el joven dijo que el magistrado es “amigo cercano” del padre y abogado de la matricida, el también juez Luis Llamoja Flores.
San Martín añadió que el juzgado a cargo del proceso no cursó ningún requerimiento previo para advertir a la sentenciada del incumplimiento de las reglas de conducta que se le exigían.
“El juez de la primera instancia consideró que hubo esta vulneración, pero la sala ha considerado que ella no fue requerida oportunamente para el cumplimiento de reglas de conducta. Ha dicho también que no es aplicable el apercibimiento de detención si previamente no fue requerida a cumplirlas (las normas de conducta impuestas para mantener su semilibertad)”, explicó.
En relación a que el padre de Llamoja habría ejercido presiones para lograr que mantenga su libertad, San Martín Castro indicó que la Oficina Nacional de la Magistratura (OCMA) “está vigilante en el tema”. “Si se cuestiona la imparcialidad o racionalidad de la decisión, la OCMA está atenta para intervenir”, acotó.
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